Quería hacer una entrada sobre lo mucho que odio que la gente cambie, pero hoy no es mi día, no estoy inspirada, escribo y borro porque no me gusta nada. Así que nada, simplemente quiero decir que odio que la gente cambie, es lo que más odio, es horrible ver como una persona que antes hablabas horas y horas sin cansarte ahora se convirtió en un completo extraño. Nada, eso. Chau.

Es la primera vez en mis quince años de vida que me aterra la idea de cumplir años, que estoy negada a cumplir años, que no quiero hacer la cuenta regresiva para mi cumpleaños. Falta un día para mi cumpleaños y yo quiero morir, no quiero cumplir años. En realidad, no quiero tener 16 años. Me parece que con 16 años ya voy a tener la edad suficiente para tener que afrontar cosas que no quiero afrontar, para tener más responsabilidades, para que cambien muchas cosas, cosas que no quiero que cambien. Estos últimos días estuve pensando todo el tiempo en eso... No sé, quizá yo estoy equivocada, es sólamente un año... ¿Un año puede cambiarme tanto?.. Siento que sí y me aterra, no sé como voy a festejar mi cumpleaños porque realmente no tengo ganas, voy a tener que poner una sonrisa falsa fingiendo que estoy feliz de cumplir otro año más de vida, pero no... Nada en mí está bien en este momento, no tengo ganas de ver personas que solamente se acuerdan de mi una vez cada año saludándome como si les importara, sonrisas falsas por todos lados, abrazos falsos, todo falso. No quiero, no estoy bien, no estoy de humor, no tengo ganas. No quiero cumplir años, quiero ser una bebé de nuevo, sin problemas, sin responsabilidades, sin nada. ¿Cómo voy a seguir creciendo si ya con 16 años me siento lo suficientemente grande como para no querer crecer más?. Quiero llorar y que todos vengan corriendo a ver que me pasa, que me abracen, que me den besos, que me regalen chupetines y ponerme a jugar de nuevo. Quiero no pensar en chicos. Quiero no tener que sentirme traicionada por personas que creí que eran mis amigos. Quiero ser una bebé de nuevo, correr, reír, quiero que nada me importe, vivir en mi burbuja mientras me ocupo de jugar y los adultos se ocupan de sus problemas, problemas que no quiero estar teniendo ahora.

Cómo te extraño nene, no sabes lo embobada que estoy. Me siento fuerte y débil a la vez, quizá eso sea el amor. Muero de miedo al pensar que soy yo, el da vinci del show. Si quiero en dos segundos termino, pero no quiero, no. Te veo brillar en espontáneo y se me parte en dos el cráneo, ese que tanto amas. Desbaratas mi seducción, verte a vos es ver a un camión, y en tú sonrisa hay más de lo que se merece. No sé si pueda llegar al final con esta sensación, más bien puede que el final llegue a mí, el horizonte se acercó. Todas las chapas del condado no me alcanzan si estoy contra mí. Da pánico estar vulnerable, nunca nadie me sonrió así. Brillas y yo ya no te miro, miro como es que te miran, mientras vos me miras. Como un demente te persigo con las lentes de otra gente, de egoísta no te vivo, teniéndote hermoso enfrente. Y hoy contribuyo lo sé, con ese karma, de andar topándome con desafíos, que desafían el carácter del cabrío, lejos de funcionar como una alarma. Pasó lo peor de la tormenta y no se me voló el peluquín, necesito contarme alguna historia que haga surgir algo del fin. Serás aquello en lo que enfoques, tipo un curda y le echo al termidor, di enfoco en vos me vuelvo hermosa, gracias, beso al curda y me voy!. Brillas y yo me pongo al lado, a donde brilla el costado que es más que no brillar. Mi ser no está tan en mi pellejo, me veo en tus ojos de espejo, por eso te quiero al lado, mi exterior es mi reflejo. Hasta la próxima vez mi viejo karma, de andar topándome con desafíos, que desafían el carácter del cabrío, lejos de funcionar como una alarma. Y como parte de mí, el fin concluye, pero no sin transformarse en el camino. ¿De qué color serías falso destino, si muriéndome lo nuestro se destruye?.

No insistas en lo que hace daño.

Que las penas no se olvidan ni con porros ni bebidas.

Necesito algo que me despabile, necesito algo que no me haga dormir, necesito pronto que vengas a asistirme. Necesito, te necesito. Necesito algo para levantar, necesito fuerzas para caminar, necesito algo que me haga sentir vivo. Necesito, te necesito. Sé que vos me vas a decir algo, creo saber lo que estás pensando, gracias pero ya no me hables más. Necesito anestecia para no necesitar. Necesito, te necesito. Necesito algo que me pueda calmar este aburrimiento, estas ganas de no estar. Estuve mucho tiempo pensando, durmiendo, durmiendo al pedo. Necesito, te necesito. Necesito una bolsa para poder cargar mis vicios, mis decepciones y debilidades, necesito una bolsa, una bolsa grande para poner todo lo que no pude darte.

Y si no me crees o pensas que te deliro, buena suerte, que dios esté contigo, pero no juegues conmigo.

Me han dicho que hay un lugar donde el sol del mediodía no quema, donde las noches de luna llena no te hacen llorar, me han dicho que en ese lugar te la pasas recostada en la arena, poniendo avisos, mujer condena al que la haga sudar. No sé por qué esa necesidad de viajar tan lejos de la realidad, poniéndote una careta en el corazón pretendes olvidar. El pasacalle en Campichuelo aquellas noches que bajo un pañuelo me decías "Mi amor, yo nunca te voy a cambiar". Prefiero naufragar en este mar de corcheas locas de atar hasta tus besos olvidar, prefiero perder el tiempo tomando unas copas de bar en bar y nunca nunca despertar. Tendría que haberle hecho caso a
Joaquín cuando dijo lo que dijo esa vez, cuando esa mujer se iba dándole la espalda. Tendría que haberle hecho caso, y así saber bien cómo era en realidad tu frente, tu lengua y tu falda. Por suerte me subí a un tranvía justo cuando me iba a atar a las vías, que me dijo "Campeón, puedo ayudarte en tu elección". Pero te advierto que este tren consejero, que no sabe lo que es mirar atrás, me ha dicho que en tu estación no va a parar.

Yo no sé por qué razón cantarle a él si debería aborrecerlo con la fuerza de mi corazón, todavía no lo borro totalmente, él siempre está presente como ahora en esta canción. Incontables son las veces que he tratado de olvidarlo y no he logrado arrancarlo ni un segundo de mi mente, porque él sabe todo mi pasado, me conoce demasiado y es posible que por eso se aproveche. Porque yo en el amor soy una idiota que ha sufrido mil derrotas, que no tengo fuerzas para defenderme, pero él casi siempre se aprovecha, unas veces me desprecia y otras veces lo hace para entretenerme. Hoy recuerdo la canción que le hice un día y en el fondo lo sabía, eso era malo para mi. Poco a poco fui cayendo en un abismo, siempre me pasó lo mismo, nadie sabe lo que yo sufrí. Una víctima total de sus antojos, pero un día abrí los ojos y con rabia lo arranqué de mi memoria. Poco a poco fui saliendo hacia delante y en los brazos de otro amante pude terminar al fin con esta historia. Yo lo quería, yo lo adoraba pero tenia que aborrecerlo, yo quise a este hombre porque pensaba que era bueno, todo fue así, todo fue por él, yo era capaz de subir al cielo para bajarle un montón de estrellas. Un pajarito que iba volando, yo lo cogí para complacerlo. Tanto se burló de mi que ahora no puedo verlo.

Tú creyendo que me quieres, yo queriéndote creer.

Será por eso que estoy sensible, la vida es impredecible.

El que no sufre no aprende.